domingo, 18 de noviembre de 2007

MYKE

miércoles, 24 de octubre de 2007



"Las librerías son fundamentales para la salud cultural de un país" (Teresa Ferreirós - Expansión)



Jorge Herralde (Barcelona, 1935) acaba de recibir el manuscrito en inglés de la última novela de Paul Auster, Un hombre en la oscuridad. “Es excelente”, dice. La diferencia con respecto a una situación similar hace unos años es que, esta vez, el documento le ha llegado directamente a su correo electrónico. Herralde considera que las nuevas tecnologías han facilitado mucho el trabajo de los editores: “Todavía es muy prematuro, pero ha sido muy útil”, afirma.

El editor asegura que la mayoría de los originales llega a través de la red y que, para las exportaciones, Internet también ha sido de gran ayuda: “En quince días, está el libro impreso en cualquier país”. En España, la venta de libros por Internet es pequeña, debido, según Herralde, a que es un país muy urbano, donde hay librerías en casi todos los núcleos de población. En EEUU, por tradición, o en América Latina, por una carencia endémica de librerías, está triunfando más la venta a través de la web.

De viaje
Herralde vive de ciudad en ciudad. La semana pasada, estuvo en la Feria del Libro de Fráncfort (Alemania) y, poco antes, en una presentación en Bilbao. A sus 72 años, el editor tiene una vida envidiablemente dinámica. Lee todo lo que cae en sus manos, aunque confiesa que le queda poco tiempo para la lectura placentera. “Las memorias, biografías y ensayos forman la parte más ociosa de mi trabajo de lector y soy fan de Josep Pla”, confiesa.

Herralde empezó en la edición como la mayoría de editores voluntaristas y vocacionales, “como lector y por deseo de compartir entusiasmo”. Fundó Anagrama en 1969, en un momento de gran ebullición política en el que ya había ciertas fisuras en el franquismo y la Ley Fraga permitía publicar textos hasta el momento absolutamente prohibidos. Herralde asegura que, en sus primeros años, la editorial tenía una fuerte intención política, que poco a poco fue remitiendo. El Che Guevara, Mao Tse Tung y Trotsky fueron de los primeros autores que llenaron el catálogo de Anagrama, que hoy alcanza los 3.000 títulos.

Dentro de sus dos líneas, narrativa y ensayo, el editor apuesta por la excelencia y la curiosidad intelectual. Anagrama ha rescatado clásicos como Georges Perec, Albert Cohen o Vladimir Nabokov. Herralde confiesa que tiene una relación personal, “de amistad”, con autores como Álvaro Pombo, Enrique Vila-Matas o, en su día, Roberto Bolaño.

No fue hasta 1979 cuando el fundador de Anagrama oyó hablar de Bukowski. Fue en San Francisco, en la editorial y librería City Lights Books. Al llegar a Barcelona, el editor se puso rápidamente en contacto con Carmen Balcells para editar al escritor alemán. Y lo consiguió. Herralde dijo una vez en una entrevista –publicada en un libro escrito por él, Por orden alfabético– que “una borrachera de vino blanco” es lo que tiene en común con este autor. Entre las últimas novedades de Anagrama, figuran títulos como La interpretación del asesinato, Jed Rubenfeld; La vida interior de Martin Frost, de Paul Auster; o Crematorio, de Rafael Chirbes.

Una figura incierta
Muchos dicen que los agentes literarios son el único intermediario posible entre el escritor y el editor. Herralde no cree que sea así. De hecho, Anagrama, igual que Tusquets o Alfaguara, gestiona los derechos de algunos de sus escritores más consagrados, como Vila-Matas, Pombo, Bolaño o Chirbes.

Herralde explica que tiene muy buenas relaciones con muchos de los más destacados agentes, pero no cree que sean una figura imprescindible. El concepto empezó en el mundo anglosajón y fue Carmen Balcells quien lo importó a España, “en parte por la dejadez de los editores españoles, que no se esforzaban en promocionar a sus autores en el extranjero, pero ahora esto ha cambiado”, explica Herralde.

El editor confiesa que sus autores fetiche se reflejan en su catálogo: Nabokov, Patricia Highsmith, Pombo, Bolaño, Tabucchi o Paul Auster. Herralde pronuncia muchos de esos nombres cuando se le pregunta por los más vendidos en los últimos años de Anagrama. Auster se ha convertido en el autor estrella de la editorial, con Brooklin Follies. Tom Sharp, Javier Marías, Alessandro Baricco, Arundhati Roy, Alberto Méndez y Ryszard Kapuscinski también han vendido más de 100.000 ejemplares con Anagrama. Herralde escoge a sus autores por la calidad literaria, “que ya se puede apreciar en las primeras líneas”. La pertenencia a un catálogo también es importante; “no publicamos cualquier género”. El editor explica que con los años se va adquiriendo olfato, pero “muchos hablan del olfato de los editores y obvian que, a menudo, están resfriados”.

Para Herralde, la política de autor es importante “aunque no se puede hacer con todos porque se acabaría por publicar mil libros al año”. Anagrama cuenta con unos treinta autores con más de diez títulos publicados en la editorial. “Cuando estos escritores despuntan, están muy codiciados por los grandes grupos y, a menudo, se producen bajas”, explica. Herralde afirmó en una entrevista que “si un autor se va de una editorial, se produce un desgarro”. Álvaro Pombo o Soledad Puértolas son dos ejemplos que se marcharon a Planeta, aunque ambos regresaron más tarde a Anagrama.

La editorial publica cien títulos nuevos cada año, 25 de ellos en edición de bolsillo. Herralde destaca el alto valor del fondo editorial. Las reediciones representan el 50% de las ventas, que ascendieron a 6,18 millones de euros en 2006. La empresa está presente en Latinoamérica. Las exportaciones representan el 25% de la cifra de negocio de la editorial.

Herralde asegura que “las librerías independientes son fundamentales para la salud cultural de un país y para la salud de editores y lectores”. En España, según señala el editor, hay una red de calidad. Librerías como La Central y Laie en Barcelona o Antonio Machado en Madrid contribuyen a que muchos buenos títulos tengan éxito.

“Es muy importante el papel de librero-lector; el buen librero tiene su tienda como un catálogo editorial en sí mismo, tiene clientes que hacen caso de sus consejos”. Herralde explica que esto se ve claramente reflejado en las listas de best-sellers de estas librerías, que no tienen nada que ver con otros rankings más mediáticos. Los girasoles ciegos, de Alberto Méndez, es un ejemplo de “un libro magnífico” que contó con el apoyo de muchos libreros. “Cuando salió a la venta, era casi imposible entrar en La Central y no comprar un ejemplar”.

Optimismo
Herralde es un hombre risueño, gracioso y, sobre todo, optimista. Confía en el buen rumbo de la lectura, de la literatura en catalán y de las editoriales independientes. “Me atengo a la realidad”, dice. El editor afirma que hay una serie de editoriales consagradas, entre las que figura la suya propia, que capean las dificultades con mayor solvencia que los grandes grupos. Señala también que, debido a la “típica e inevitable dinámica de los grandes grupos”, éstos dejan de publicar o descatalogan libros culturalmente importantes, que son elegidos por editoriales más pequeñas.

El sector de las editoriales independientes está en plena evolución. “Las barreras de entrada son casi inexistentes, lo difícil es mantenerse”, dice Herralde. Varios ejemplos de editoriales que han sabido salir adelante, en opinión del editor, son Minúscula y Libros del Asteroide, en Barcelona; Antonio Machado, en Madrid; y Periférica, en Extremadura, entre otras muchas. “Las buenas librerías hacen de incubadoras, tratan a estas editoriales con mucho cariño”, explica.

Herralde también es optimista en lo que se refiere a la lectura. “Los números de Anagrama no me dicen lo contrario: no hemos variado nuestra línea editorial, pero seguimos creciendo”, explica. El editor discute las estadísticas y afirma que hay más lectores y más compradores de libros. Sin embargo, asegura que la oferta de nuevos títulos es “desmesurada”.

Una de las líneas más tradicionales de la editorial es la traducción de títulos en catalán al castellano. Coincidiendo con la Feria del Libro de Fráncfort, Anagrama presentó, en la colección Compactos, nueve títulos de autores catalanes traducidos que ha ido publicando en las últimas décadas, como Pere Calders, Sergi Pàmies, Baltasar Porcel o Quim Monzó.

La razón de la querencia de estos autores no es política, “no obedece a causas extraliterarias, mis pulsiones patrióticas son, me temo, de muy baja intensidad”, escribe Herralde, en una presentación publicada sobre esta biblioteca. Las razones del editor se reducen a “la búsqueda de la excelencia, la curiosidad intelectual, el rastreo de nuevas voces, el rescate de grandes autores”, afirma. Herralde empezó a leer en catalán a los veinte años, “con un libro magnífico”: Vida de Manolo contada per ell mateix, de Josep Pla. Entre las mayores satisfacciones personales, literarias y editoriales que le han proporcionado los escritores catalanes, figura haber podido incorporar a su catálogo clásicos del siglo XX como Josep María de Sagarra, con Memòries y Vida Privada; Pere Calders, con Ruleta rusa y otros cuentos; J.V. Foix, con Crónicas de ultrasueño; y Llorenç Villalonga, con Dos pastiches proustianos.

¿Una recomendación? La interpretación de un asesinato, de Jed Rubenfeld. También Crematorio, de Chirbes, que por varias razones no está suficientemente valorado en España.

Poco entusiasmo
Herralde considera que la acogida por parte del mercado español de la literatura catalana traducida no ha sido “muy entusiasta, por decirlo de forma suave”. Las librerías están invadidas por autores españoles y por traducciones de países anglosajones. El caso del autor catalán tiene handicaps adicionales que agravan la situación: el público de Cataluña lee, mayoritariamente, en catalán y en el resto de España existe cierta aversión a onomásticas y toponimias de los libros catalanes.

Herralde cree que muchos escritores, como Juan y Luis Goytisolo, Eduardo Mendoza o Vila-Matas, que se expresan en castellano, por el hecho de ser catalanes, “tienen muy difícil acceder, por ejemplo, al Premio Cervantes”. Herralde precisa que ninguno de estos autores, salvo Pere Gimferrer (que escribe en ambos idiomas), son miembros de la Real Academia Española. El editor afirma también que, en el mundo contemporáneo, “los autores que funcionan son los nacionales y los anglosajones”. En España no se publican demasiados títulos de escritores italianos, franceses, polacos o alemanes en castellano. Herralde también reconoce que parte de la culpa de esta situación radica en la cerrazón de los escritores catalanes, que no van a Madrid a promocionar sus libros.

Para el fundador de Anagrama, la Feria del Libro de Fráncfort, que finalizó el domingo, no sirve para mucho. “Los contratos se van cerrando a lo largo del año, no se espera a la feria. Sólo es útil para promocionar los derechos de los autores españoles con colegas extranjeros”. Herralde calificó el hecho de que sólo acudiera la literatura catalana, y no la cultura catalana, a Alemania de “automutilación objetiva y autoglorificación política”.

lunes, 22 de octubre de 2007

LAS MEJORES PELICULAS

American History X (1998) Estados Unidos
Tony Kaye
Edward Norton, Edward Furlong, Fairuza Balk, Stacy Keach, Elliott Gould, Avery Brooks, Beverly D'Angelo, Jennifer Lien, Guy Torry, Ethan Suplee
Excelente

Braveheart (1995) Estados Unidos
Mel Gibson
Mel Gibson, Sophie Marceau, Patrick McGoohan, Catherine McCormack, James Cosmos, Brendan Gleeson, Brian Cox, Peter Mullan, Gerard McSorley, Angus MacFadyen
Excelente

El precio del poder (1983) Estados Unidos
Brian de Palma
Al Pacino, Michelle Pfeiffer, Steven Bauer, Mary Elizabeth Mastrantonio, Robert Loggia, F. Murray Abraham, Miriam Colon, Harris Yulin, Paul Shenar
Excelente

La casa de las dagas voladoras (2004) China
Zhang Yimou
Zhang Ziyi, Takeshi Kaneshiro, Andy Lau, Song Dandan
Muy buena

Million Dollar Baby (2004) Estados Unidos
Clint Eastwood
Clint Eastwood, Hilary Swank, Morgan Freeman, Anthony Mackie, Jay Baruchel, Mike Colter, Lucia Rijker, Brian O'Byrne, Margo Martindale, Riki Lindhome
Muy buena

El Señor de los anillos: el retorno del rey (2003) Estados Unidos
Peter Jackson
Elijah Wood, Ian McKellen, Viggo Mortensen, Sean Astin, Liv Tyler, Billy Boyd, Dominic Monaghan, Orlando Bloom, John Rhys-Davies, Ian Holm
Muy buena

El club de la lucha (1999) Estados Unidos
David Fincher
Brad Pitt, Edward Norton, Helena Bonham Carter, Meat Loaf, Jared Leto, Van Quattro, Markus Redmond, Michael Girardin, Rachel Singer
Muy buena

El sexto sentido (1999) Estados Unidos
M. Night Shyamalan
Bruce Willis, Toni Collette, Haley Joel Osment, Olivia Williams, Trevor Morgan, Donnie Wahlberg, Peter Tambakis, Jeffrey Zubernis, Bruce Norris
Muy buena

Seven (Se7en) (1995) Estados Unidos
David Fincher
Brad Pitt, Morgan Freeman, Gwyneth Paltrow, Kevin Spacey, John C. McGinley, Richard Roundtree, R. Lee Meyer, Leland Orser, Richard Schiff
Muy buena

Pulp Fiction (1994) Estados Unidos
Quentin Tarantino
John Travolta, Samuel L. Jackson, Uma Thurman, Tim Roth, Ving Rhames, Eric Stoltz, Rosanna Arquette, Harvey Keitel, Christopher Walken, Bruce Willis
Muy buena

Uno de los nuestros (1990) Estados Unidos
Martin Scorsese
Robert De Niro, Ray Liotta, Joe Pesci, Lorraine Bracco, Samuel L. Jackson, Paul Sorvino, Debi Mazar, Mike Starr, Tony Darrow, Frank Sivero
Muy buena

Blade Runner (1982) Estados Unidos
Ridley Scott
Harrison Ford, Sean Young, Daryl Hannah, Rutger Hauer, Edward James Olmos, Joanna Cassidy, Brion James, Joe Turkel
Muy buena

La guerra de las galaxias: El imperio contraataca (1980) Estados Unidos
Irvin Kershner
Mark Hamill, Harrison Ford, Carrie Fisher, Alec Guinness, Billy Dee Williams, Anthony Daniels, David Prowse, Kenny Baker
Muy buena

Los caballeros de la mesa cuadrada (y sus locos seguidores) (1974) Reino Unido
Terry Jones & Terry Gilliam
John Cleese, Michael Palin, Graham Chapman, Eric Idle
Muy buena

Los siete samuráis (1954) Japón
Akira Kurosawa
Toshiro Mifune, Takashi Shimura, Yoshiro Inaba, Seiji Miyaguchi, Minoru Chiaki, Daisuke Kato, Ko Kumura, Kamatari Fujiwara, Keiko Tsushima
Muy buena

Casablanca (1942) Estados Unidos
Michael Curtiz
Humphrey Bogart, Ingrid Bergman, Paul Henreid, Claude Rains, Conrad Veidt, Sydney Greenstreet, Peter Lorre, Dooley Wilson, S.Z. Sakall, Madeleine LeBeau
Muy buena

miércoles, 17 de octubre de 2007

LIBROS

Lista de libros



EL CABALLERO DE LA ARMADURA OXIDADA



MEIN KAMPF



EL ANTICRISTO



1984



EL ARTE DE LA GUERRA




PEQUEÑOS FRAGMENTOS 3

CAPITULO 2 DEL ANTICRISTO


¿Qué es lo bueno? Todo lo que eleva en el hombre el sentimiento de poder, la voluntad de poder, el poder mismo. ¿Qué es lo malo? Todo lo que proviene de la debilidad. ¿Qué es la felicidad? El sentimiento de lo que acrece el poder; el sentimiento de haber superado una resistencia. No contento, sino mayor poderío; no paz en general, sino guerra; no virtud, sino habilidad (virtud en el estilo del Renacimiento. virtud libre de moralina). Los débiles y los fracasados deben perecer; ésta es la primera proposición de nuestro amor a los hombres. Y hay que ayudarlos a perecer. ¿Qué es lo más perjudicial que cualquier vicio? La acción compasiva hacía todos los fracasados y los débiles: el cristianismo.

PEQUEÑOS FRAGMENTOS 2

CAPITULO 1 DEL ANTICRISTO


Mirémonos de frente. Somos hiperbóreos, y sabemos bastante bien cuán aparte vivimos. "Ni por tierra ni por mar encontrarás el camino que conduce a los hiperbóreos," Píndaro ya sabía esto de nosotros. Más allá del septentrión, de los hielos, de la muerte, se encuentra nuestra vida, nuestra felicidad... Nosotros hemos descubierto la felicidad, conocemos el camino, hallamos la salida de muchos milenios de laberinto. ¿Quien más la encontró? ¿Acaso el hombre moderno? "Yo no se ni salir ni entrar; yo soy todo lo que no sabe ni salir ni entrar", así suspira el hombre moderno... Estábamos aquejados de esta modernidad, de una paz pútrida, de un compromiso perezoso, de toda la virtuosidad impura del sí y del no modernos. Semejante tolerancia y amplitud de corazón, que lo perdona todo porque lo comprende todo, es para nosotros viento de sirocco. Vale más vivir entre los hielos que entre las virtudes modernas y otros vientos meridionales... Fuimos bastante valerosos; no tuvimos clemencia ni para nosotros ni para los demás; pero por largo tiempo no sabíamos dónde nos conduciría nuestro valor. Nos volvimos sombríos, nos llamaron fatalistas. Nuestro fatum era la plenitud, la tensión, la hipertrofia de las fuerzas. Teníamos sed de rayos y de hechos; estábamos muy lejos de la felicidad de los débiles, de la abnegación, En nuestra atmósfera soplaba un huracán; nuestra naturaleza se oscurecía porque no hallábamos ninguna vía. Esta es la fórmula de nuestra felicidad: un si, un no, una línea recta, una meta.

PEQUEÑOS FRAGMENTOS

PROLOGO DEL ANTICRISTO



Este libro está hecho para muy pocos lectores. Puede que no viva aún ninguno de ellos. Esos podrían ser los que comprendan mi Zaratustra: ¿acaso tengo yo derecho a confundirme con aquellos a quienes hoy se presta atención? Lo que a mi me pertenece es el pasado mañana. Algunos hombres nacen póstumos. Las condiciones requeridas para comprender y para comprenderme luego con necesidad, las conozco demasiado bien. Hay que ser probo hasta la dureza en las cosas del espíritu para poder soportar sólo mi seriedad y mi pasión. Hay que estar acostumbrado a vivir en las montañas y ver a nuestros pies la miserable locuacidad política y el egoísmo de los pueblos que la época desarrolla. Hay que hacerse indiferente; no debe preguntarse si la verdad favorece o perjudica al hombre. Hay que tener una fuerza de predilección para las cuestiones que ahora espantan a todos; poseer el valor de las cosas prohibidas: es preciso estar predestinado al laberinto. De esas soledades hay que hacer una experiencia. Tener nuevos oídos para una nueva música; nuevos ojos paca las cosas más lejanas: nueva conciencia para verdades hasta ahora mudas, y la voluntad de la economía en grande estilo; conservar las propias fuerzas y el propio entusiasmo; hay que respetarse a sí mismo, amarse a sí mismo: absoluta libertad para consigo mismo... Ahora bien; sólo los forjados así son mis lectores; mis lectores predestinados; ¿qué me importan los demás? Los demás son simplemente la humanidad. Se debe ser superior a la humanidad por la fuerza, por el temple, por el desprecio...

martes, 16 de octubre de 2007

VOY A IR PONIENDO LOS LIBROS
QUE HE LEÍDO Y ESTOY LEYENDO
CON UNA PEQUEÑA OPINIÓN
Y MI VOTACIÓN DEL 1 AL 10.


1984 - El Mejor Libro de mi
Vida- 10
Farenheith 451 - El poder de la Información - 6
El Señor de los Anillos - Un clásico - 7
El Hobbit - El mejor de la saga - 8
El Silmarilion - (Muy duro) - 6
El Código Da Vinci - Una sorpresa - 6
Mein Kamf - Un pensamiento - 8
El Juego de Ender - La manipulación - 10
El Perfume - Un desengaño - 4
El Anticristo - La gran verdad - 8
El Caballero de la Armadura Oxidada - Reflexión - 9
Diario de un Skinhead - Verídico y Arriesgado - 7
Mitos y Leyendas de Hitler - Mucha tontería - 3
Mitos y Leyendas de la II Guerra Mundial - Mucha Propaganda - 3
El Lobo Estepario -
20 grandes conspiraciones de la Historia - Revelador - 5
La Biblia - Un Cuento -
El Corán - Otro Cuento -
El Poder de la Mente - Poderoso - 8
El Arte de la Guerra - Inteligente - 8
El Demonio y la Señorita Prym - Aburrido - 4
El Clan del Oso Cavernario - Largo - 5
Mi Doctrina - Una
unión de Pensamientos - 7
Los renglones torcidos de Dios - ¿Cual es la Verdad? - 5
Elric de Melnibone - Fantástico - 8
La Fortaleza de la Perla - Demasiada
Fantasía - 6
Buenos Presagios - Muy Inteligente - 9
Mort - Desternillante - 7
Dioses Menores -
Sátira de las Religiones - 8
El Segador -
Fantásticamente loco - 8
El Color de la Magia - El Principio - 6
Los signos del zodiaco y su
Carácter - Para Pensar - 8
Neverwhere - paranoia - 3
Pesadillas y Alucinaciones - historias muy
impactantes - 7

miércoles, 3 de octubre de 2007

3/10/2007

Montilla reconoce el papel de los editores en Fráncfort

  1. Los Príncipes inauguran en Barcelona la feria internacional del libro
  2. El gremio reclama al Gobierno que suprima el intercambio de libros escolares
 Los príncipes de Asturias conversan durante el acto de inauguración de Líber, ayer en Barcelona. Foto:  EFE / GUIDO MANUILO
Los príncipes de Asturias conversan durante el acto de inauguración de Líber, ayer en Barcelona. Foto: EFE / GUIDO MANUILO
ERNEST ALÓS
BARCELONA
La feria del libro que inauguraron ayer los Príncipes de Asturias era Liber, el certamen hispanoamericano que acogen alternativamente Barcelona y Madrid. Pero la que estaba en mente de muchos era de Fráncfort. El presidente de la Generalitat de Catalunya, José Montilla, además de proclamar el aprecio y respeto de Catalunya por la Corona --con aplausos en la sala--, lanzó ayer un mensaje de concordia a los editores catalanes cuando solo falta una semana para la inauguración de la Feria del Libro de Fráncfort, con Catalunya como cultura invitada. Según Montilla, Fráncfort será "un escaparate del que la cultura catalana no ha dispuesto nunca", y aseguró que sin la "presencia continuada y trabajo de los editores catalanes no hubiese sido posible esta designación".
En su discurso, el príncipe Felipe destacó la "pujante actividad" de una industria editorial española "fuerte y culturalmente plural", que incluye todas las "lenguas que enriquecen el variado patrimonio cultural" del país.
La intervención de Montilla fue bienvenida por el presidente del Gremi d'Editors de Catalunya, Antoni Comas. Sin embargo, parece que llegan tarde. Según Comas, las "buenas palabras" no casan con la actitud con que, en su opinión, se planteado la presencia de Catalunya en la feria, dando prioridad a la difusión de la lengua catalana frente a la promoción del sector editorial.

QUEJAS DE LOS EDITORES
La apertura de Liber, con Perú como país invitado y presencia de 700 editoriales de España y América Latina, sirvió para que el presidente de la Federación de Gremios de Editores de España, Jordi Úbeda, presentase un "repertorio de peticiones y quejas" del sector al ministro de Cultura, César Antonio Molina. Úbeda criticó la liberalización del precio de los libros de texto, reclamó que se sustituyan los "insidiosos" y "obsoletos" programas de intercambio y reutilización de libros escolares por un sistema de "verdadera gratuidad", pidió la privatización del sistema de registro de libros del ISBN para evitar su descentralización autonómica y reclamó que se mantengan los cánones en concepto de propiedad intelectual sin beneficiar solo a determinadas entidades "mediáticas", en una clara alusión a la SGAE.